Esta semana me arde el alma, pido como simple ciudadano las más sinceras disculpas a 200 niñas que hoy hace un año fueron secuestradas y todos lo sabíamos y nadie hizo ni hace nada de nada. Mis disculpas, peques.
200 Niñas en Nigeria hace un año fueron secuestras y siguen secuestradas.
Perdonar al mundo, peques, estamos programados para olvidar todo aquello que deja de ser noticia y nos produce dolor, sea lo que sea. El dolor ajeno se olvida en cuanto se convierte en nuestro propio dolor y se nos hace difícil de digerir.
Tenemos la magia de los malos magos, los cuáles con un solo botón pueden apagar ese dolor de nuestra alma cambiando de canal hacia algo más llevadero.
Hace un año que secuestraron a casi 200 niñas en Nigeria. Televisiones y medios de todo tipo olvidaron pronto ese secuestro, y esta semana celebran este primer aniversario gritando durante un instante: ¿Dónde están? Hipócritas.
Los medios son quien pueden presionar a los gobernantes para que se busquen a estas chicas. ¿Por qué no se hace? Porque tal vez no interese a nadie y les venda mucho más un resultado futbolístico o deportivo o bien una pelea política o un programa llamado de entretenimiento de la televisión. Este mundo no es como debería ser. Yo solo soy un loco que lo que puedo hacer es gritar en los medios que deseen publicarme lo que siento. Se llama granito de arena.
